LA PALABRA EN TODAS SUS FORMAS

“La tibia garra testimonial”, fue el encuentro de cronistas, crónicas y ciudades que se desarrolló en Salta en estos finales de junio con la presencia de periodistas y escritores de muy diversas provincias argentinas y de Bolivia.

Un antes y un después – seguramente- entre  muchos que tejieron sus crónicas al arrullo de cronistas avezados que, a través de cursos, talleres, conferencias, mesas, paneles de cronistas, lecturas y ponencias, pusieron todo lo que tenían sobre la mesa.

El equipo de la UNSa, liderado por Betina Campuzano, Verónica Gutiérrez  y Julieta Colina más un gran grupo de alumnos trabajó intensamente desde hace un año para su realización. Y se notó.  Todo salió más que bien, entre lo académico y lo periodístico y cada asistente pudo aprender e intercambiar saberes como en una gran feria de trueque.

Entre tantas actividades interesantes, se registró la presencia de Martín Ale y de Tomás Pérez Vizzón, ambos editores de la revista Anfibia, una publicación web de la Universidad de San Martín que, de unos años a esta  parte se ha convertido en una revista de culto que publica: crónicas, ensayos y mucho más, en este mundo que apuesta a la muerte de la palabra.

Martín Ale, es jefe de redacción y editor de la publicación, entre otras afirmó que celebraba este encuentro en el que se le da tanta importancia a las crónicas modernistas básicamente  “porque me encanta reivindicar a la crónica periodística dentro de esta tradición, por la profunda conexión con lo contemporáneo y por el  gran compromiso con los conflictos sociales por los que atraviesa la sociedad”. Agil, divertido, Martín Ale indicó mucho material de lectura, además de brindar el a-b-c- de la construcción de crónicas e instar a todos a escribir y a publicar, así sea en las redes sociales, lugares en donde insospechadamente también se instaló la crónica  urbana.

Otro “anfibio”, Tomás Pérez Vizzón, en un alto en el camino del curso que brindó sobre “Narrativas Digitales” dejó en claro que “en lo personal me siento más cercano a un you tuber que a un periodista” y brindó en su curso  las claves de las novedosas herramientas para la construcción de esas otras crónicas. “Podría haber dado un curso solo sobre escritura pero más bien me parece que el desafío de hoy es conocer toda las formas, todos los caminos para conectarse con el público lector que incluye absolutamente a todas las redes sociales. Hoy, la gente ya no entra  a las páginas web desde la computadora, más bien lo hace desde las redes sociales, así que yo trabajo descubriendo y probando todo lo que se puede hacer desde ese elemento que todos llevamos en la mano: el celular”

Tres días en el que la crónica, como reina limítrofe entre el periodismo y la literatura se campeó por pequeñas salas de la ciudad y se reunió también con la tecnología, las redes sociales, con las realizaciones audiovisuales, presentaciones de libros, muestra de fotografías y por supuesto  con la poesía, sirviendo de gran continente en el que cada asistente – más de 100 “escribidores”- pudo campear a su antojo.