Considerada una de las mejores intérpretes de instrumentos de viento de origen andino, la compositora, instrumentista y coplista se presentará el sábado 25 de febrero a las 20 hs, en el Anfiteatro de la Usina Cultural, en Juramento y España
En un recital al aire libre y con entrada gratuita, por sus 20 años con los vientos andinos, Micaela Chauque compartirá canciones de raíz andina que integran los álbumes: Instrumental de la Quebrada, Quenas y Sikus y Jallalla; trabajos discográficos que contaron con artistas invitados que marcaron su carrera.
Junto a su voz, el sonido de quenas, quenilla, sikus, toyo, caja y charango, propiciarán un encuentro donde se evocarán a los ancestros de nuestro norte.
“Vamos a hacer un espectáculo musical recorriendo tres repertorios, mi primer álbum, el segundo, quenas, sikus y jallalas para comenzar y después vamos a incorporar canciones inéditas que fueron naciendo posteriormente y con las que vamos a grabar un disco” – señaló Micaela en diálogo con ARTENAUTAS.
Su repertorio incluye sus primeras obras: El Saltarín, Alfonsina y el mar, Florcita de Cardón, Tengo bagualas y coplas, El Milagroso, Romance de viento y quena, y nuevas como Jallalla, con un final de carnavalitos, Soy de la Puna y Demasiado corazón.
– ¿Qué significan estos 20 años de carrera musical?
– Es una experiencia muy linda, de mucho esfuerzo que requiere dedicación, mucho amor y perseverancia sobre todo. Muchos años de estar continuamente en escenarios de diversas dimensiones, de compartir con otros músicos, viajar por todo el mundo. Son experiencias que quedan grabadas. Son veinte años como artista profesional pero en realidad vengo tocando de hace mucho tiempo atrás.
– ¿Te has proyectado desde Tilcara, tocando instrumentos, es decir en condiciones poco usuales, pienso en la lejanía de los centros de difusión…
– Si, es una elección que hice para mantener la esencia de la música andina. He decidido dedicarme completamente a la música, más allá de que antes me dediqué mucho a la danza hasta que me di cuenta que la música era el lugar desde el que iba a expresarme mas libremente y así fue que empecé con la quena, estudié instrumentos de viento, charango, percusión y me cautivaron los vientos, folclore…Y eso se dio por estar viviendo en Tilcara, una ciudad andina de la Quebrada de Humahuaca, con gran tradición de sikus y quenas, claro, aunque también estuve en Salta y Buenos Aires estudiando.
– ¿Cómo es esto de ser mujer música en tu tierra?
– Luego de haber estudiado música, estudié folclore en Buenos Aires y viví algunos años allá, entonces al volver a Tilcara para mi fue absolutamente natural, tocar esos instrumentos. Sin embargo en Tilcara y la región no tanto, porque la quena es ejecutada tradicionalmente por hombres y más en los ámbitos tradicionales como fiestas y celebraciones como bandas de sikuris, Semana Santa, ceremonias… como en cada pueblo en el norte. Costó pero aquí estoy.
– ¿Te interesa traspasar fronteras musicales, verdad?
-La vida me fue ofreciendo oportunidades distintas así fue que conocí a chicos que hacen música electrónica como Tremor, Leo Martinelli, haciendo coplas, bagualas, con sikus y quenas,… luego conocí a Divididos acá en Tilcara, cuando vinieron a presentar Amapola del 66 me invitaron a tocar con ellos y me hizo muy feliz. Esos cruces fueron muy enriquecedores y fueron dándose muchas veces por invitaciones de los otros artistas que están muy interesados en encontrarse con la música de nuestras raíces.
Micaela es hija de kollas, es licenciada en folclore, luthier, docente y además de haber creado el encuentro de mujeres músicas, forma parte de la Agrupación de Comadres “Las Warmis Alegres” que celebran su evento cada “jueves de comadre” (previo al Carnaval) en Tilcara. En 2019 recibió el Premio Gardel al Mejor Álbum folclórico de artista femenina y además de sus tres discos ha tenido colaboraciones en discos de otros artistas como Jaime Torres, Peteco Carabajal, Tremor ( música electrónica) entre otros.
– ¿Te interesa el trabajo colectivo?
– Yo me considero una activista de la cultura. Las oportunidades se van dando de distintas maneras, tocando quenas y sikus con bandas de sikuris, celebraciones de santos, en ruedas de coplas.
Con las mujeres, las colegas artistas eran círculos más chiquitos que no se visibilizaban tanto así que decidí impulsar el Jallalla Warmi, el Encuentro Nacional de Mujeres Artistas donde cantoras e intérpretes de todo el país vienen al festival. Nos conocimos entre todas, entablamos amistad y vamos logrando cosas. Ya vamos por el séptimo encuentro y sigue siendo el principal festival femenino que se realiza en la Quebrada de Humahuaca en cada segunda semana de enero. Este año fue mas reducido pero sin embargo tuvimos alrededor de 23 artistas, 3 o 4 agrupaciones de bandas de sikuris, varias bandas de música tradicional, superaron largamente las 200 mujeres trabajando.
Nosotras seguimos trabajando.
Patricia Patocco
Fotografía de Franco Vera