Hay que ver el entusiasmo que tienen. Desde que uno entra a la casa se ve alegría en todos los que la habitan, los que van de a poco construyendo este nuevo espacio de música popular en Salta. La Escuela de Música Popular “Cuchi Leguizamón”, para la enseñanza de canto e instrumentos, para encuentros y recitales en la pequeña sala auditorio que lleva el nombre de otro gran músico salteño: José Juan “Coco” Botelli, más 8 o 9 aulas y sala de percusión, todo en una casona remodelada de Avda Sarmiento 985.
Profesores, directivos y alumnos profesan algo así como un entusiasmo religioso, en el que todos quieren hacer su aporte: un piano que alguien no usa fue recibido como donación (“y hay que arreglarlo un poco y ponerlo a andar”), profesores de música, integrantes de grupos, músicos populares de todo tipo de géneros e instrumentos quieren enseñar allí y gente de todas las edades está acudiendo a inscribirse. El señor grande que viene desde Rosario de Lerma, el papá con tres hijos que acomodó los horarios para aprender cada uno lo suyo… ya palpita en esa casa un aire de familiar bohemia.
La “Cuchi”, como ya la llaman se formó a partir de una asociación sin fines de lucro, creada puntualmente para ello, presidida por el “Gato“ Bonduri, el primer gestor de la idea junto a Sergio Mosa que ya no está. Luego convocaron a Arturo “Pachula” Botelli, quien perfiló el diseño curricular de un taller de 3 años, con práctica en dos horarios a la semana de instrumentos y práctica de ensambles y lo artístico en escenario ” Para eso tenemos esta sala auditorio, donde pensamos hacer presentaciones de libros, actuaciones y demás, como para promocionar la escuela, con la idea de perfilar un centro cultural”- explica “Pachula” Botelli, ganado por el entusiasmo y sigue explicando – “ el Director artístico es Daniel Tinte, importante músico y compositor que tiene un estudio de grabación y dan clases entre otros además de Daniel, los músicos del grupo Niebla, Oscar Echazú, Marcelo Rioja, trompetista, Marcelo Antonietti, en charango y aerófono, Gustavo Kantor, Leonel Goldstein”
¿Hacía falta en Salta una escuela de música popular?
Es un viejo anhelo de los músicos de Salta… en el 96 o 97, entre varios de estos profes que te nombro y varios más, como Juan Botelli y Myriam Dagúm, armamos un diseño de música popular que presentamos a la Escuela de Música “Lo Giudice”, pero nunca se incorporó a la currícula, luego lo adecuamos y lo presentamos en la UCASAL, pero ya tenían armado lo que querían así que nunca se dio y siguió en danza la historia. Finalmente, la armamos en esta hermosa escuela popular: una estructura de 3 años con las prácticas instrumentarles, de ensamble y al cabo del cuatrimestre una práctica de análisis y apreciación musical que dependerá de los grupos y que quedará a criterio del director académico y de extensión David Gómez García, músico colombiano, coordinador de la UCASAL. Nos interconectamos, aunque funcionamos de manera independiente, claro. Este es un emprendimiento privado.
¿Qué instrumentos y música van a enseñar aquí?
Enseñamos jazz, tango, rock, folclore y todo lo que está a la vuelta . Con profesores de la talla de Oscar Echazú, que toma a su cargo a principiantes en guitarra eléctrica y bossa nova, en instrumentos regionales Juan Pablo Núñez Regueiro, Marcelo Antonietti ; María Eugenia Pacheco en piano, Palmito Lamas, Julio Lamas, Hernán Bass, Florencia Galvez, Pablo Chireno, Romina Granata, Eloy Notario, Cándido Notarfrancesco, tenemos un ramillete de excelentes profesores . Ellos trabajan bien a pulmón, solo a un porcentaje de las cuota , esperamos poder mejorar esto en breve pero para eso necesitamos que esto funcione y quizás lograr algún subsidio. Le pedimos a los artistas de la comunidad que se acerquen para proponer y armar actividades, este es el espíritu.
Pachula, pero recién te estabas jubilando…
Sí, así es pero yo soy un armador de cosas, de experiencias musicales y me fascina la docencia, así que cómo no sumarme para organizar esto. Hay muchos tigres y leones en la escuela de música, enseñando en forma particular, escuelitas muy chiquitas, armando grupos, entonces, cómo no organizarnos y armar un lugar, la historia de las orquestas y coros, que pende de un hilo, la escuela de música de Orán que está casi por cerrarse…no se puede permitir esto, hay que seguir trabajando. Hay un montón de gente que enseña….
¿Y cuál sería la diferencia de la “Cuchi” con todas estas escuelas o institutos de enseñanzas musicales?
Que nosotros aglutinamos como centro cultural y escuela musical, a un montón de artistas y gente como Lucas Avido que filma, gente que arma la web. Es una forma de organizarse en épocas no muy fáciles.
El “Gato” Bonduri , profesor de canto y gran mentor de la idea, aclara que esta idea simpatizó con mucha gente que realmente esperaba que surgiera una escuela de música popular, hubo un gran contagio de ganas de deseos. Estas es una asociación civil , diferente a otras, nosotros no queremos poner cargas horarias ni poner título de profesor a nadie, no pretendemos eso…Esta es una escuela para que la gente venga a aprender un instrumento en un plan de tres años. Vamos de a poco, haciendo pequeñas inversiones, primero con la Sra. Soledad Carrizo, de la empresa Melody, que fue la única casa que aceptó trabajar con nosotros, primero prestando instrumentos y luego acordando planes de pago accesibles. Queremos ir comprando todos los instrumentos que son una verdadera tentación para los chorros, así que no queremos que la gente tenga que transporatrlos, calculo que en 60 días ya vamos a tenerlos para que los chicos puedan estudiar.
¿Fue tu sueño esta escuela?
Si, fue mi sueño…pero luego al compartirlo, descubrí que era el sueño de muchos y así fue más sencillo realizarlo. Somos parte de una sociedad y nos debemos a ella. Salta tiene un legado musical muy fuerte y queremos contribuir a él. Creo que la interconexión es la fuerza para lograr cosas. Vi varias casas y cuando tuve la idea de la casa, lo hablé a Botelli, él se comprometió y es el jefe de la manada, de un silbido empezaron a aparecer todos los lobos….que acudieron inmediatamente al desafío.
“La escuela con el poco tiempo que tiene viene haciendo camino con el prestigios de sus docentes, pensamos que va a ser un hito en la cultura de Salta, aspiramos a participar en cuestiones como la ley de música y estamos como organismo de la ciudad viendo y opinando sobre todos los temas que hacen a la vida de los músicos”- agrega Botelli
“Es un sistema cooperativo espiritual armonioso, popular – continúa Bonduri- Voluntad, capital e ideas, así se hizo , claro que hay socios fundadores. Tenemos que agradecer a Mercedes Montes, Federico Torres, Martin Cruz, Martín Antonietti, socios que aportaron capital y son bienvenidos todos los que se quieran sumar”
“Somos una escuela privada, no lo podemos hacer de otra forma, pero la nuestra es una oferta seria, esperamos brindar lo mejor. Y esperamos que el estado nos permita llegar a los funcionarios, para mostrarles nuestros proyectos que tiene una proyección social importante, agradecemos al intendente, al diputado Godoy, a la secretaria de gestión Sandra Píccolo y tuvimos de madrina a Eulogia Tapia. Estuvo el Secretario de Cultura y el Intendente y esperamos que las conexiones de los afectos funcionen y nos puedan ayudar quizás con becas o a comprar instrumentos. No queremos que lo económico sea una espada que nos atraviese con la preocupación económica, nosotras estamos en una propiedad alquilada y necesitamos que el estado también cumpla su función y nos ayude. Vamos cumpliendo sueños y agradecemos a los periodistas y a todos los que nos ayudan a mostrar esto que estamos haciendo”- dice para finalizar Botelli.
La Escuela de Música Popular “Cuchi Leguizamón” está en plena inscripción y funciona en Avda. Sarmiento 985.
(Patricia Patocco)