A fines de de mayo pasado, el día de su cumpleaños número 17, Facundo Romero, se dio el gusto de subir su primer tema a You Tube.
Antes había aprovechado los días de cuarentena para terminar de dar forma a su primer tema “Nena, mal ahí” y también para grabarlo y subirlo a la red, donde cosecha adeptos día a día.
Desde los 9 o 10 años escucha rap español y hace rato que empezó a escribir sus propias letras “Me encantaba escribirlas, por supuesto ahora las veo y me doy cuenta que le faltaba sentido y hasta estructura. Después desde los 13 empecé a ir a las batallas de rap y descubrí que podía improvisar. Me animé, me empezó a gustar y me fanaticé con las batallas, así que no solo iba a las plazas todos los fines de semana a mirar, sino a participar. Entre los 15 y 16 estuvo en tres eventos diferentes en Jujuy y en la Liga Salteña de Freestyle, donde diez competidores batallaban en fechas diferentes”- cuenta con cierta timidez que en realidad, desaparece como por arte de magia apenas sube a un escenario o cuando está en plena batalla.
En esos momentos, las palabras salen de sus labios como si las hubiera estudiado con esmero y no es tan así, porque las “batallas” entre los jóvenes surgen de temas pautados en el momento. Rap, trap, freestyle son primos hermanos de un género que crece en nuestro país, herederos del hip hop de los ochenta y que tiene en las voces de Duki, Paulo Londra y chicas como Cazzu, algunos de los exponentes más importantes de un movimiento que no para de crecer.
“Mi tema era una letra que escribí hace un par de años – explica Facundo- y empecé a trabajarla de nuevo, a hacerle el estribillo y demás. Cuando supe lo que quería, hablé con un amigo que tiene un pequeño estudio de grabación y le pedí la parte instrumental, con el ritmo y la velocidad que necesitaba y finalmente me fui al estudio a grabar”
El trap es un género que ha ganado cada vez más seguidores entre la gente joven
Como los payadores de antes, algunos chicos tienen una particular facilidad para enfrentarse en “duelos” de palabras en lugares y escenarios que van de plazas públicas a you tube y viceversa.
Parte de la cultura urbana de una gran segmento de jóvenes que quieren decir y hacer a su modo, con la gracia y la contundencia de la rima y la palabra, aún en cuarentena, más que nunca en cuarentena.