QUÉ VIVA MÉXICO

Hoy, miércoles 30 de octubre  en la 12 º Temporada del Cine Club de los miércoles, coordinado por Alejandro Arroz y Mati Casermeiro y se exhibe en el Colegio Médico, Marcelo T. de Alvear 1310 a las 21 hs con entrada libre y gratuita,  se proyectará QUE VIVA MÉXICO. México, 1932 con dirección: SERGEI M. EISENSTEIN, GRIGORI ALEKSANDROV

Guion: Grigori Aleksandrov

Fotografía: Gabriel Figueroa, Eduard Tisse (B&W)

Música: Juan Aguilar

Duración: 84 minutos

Reparto

Félix Balderas, Martín Hernández, David Liceága, Julio Saldívar, Isabel Villaseñor, Maruja Grifell, Raúl De Anda, Lupita Gallardo, Sara García, Baronito, Arcady Boytler, Concepcion

 

Sinopsis

 

Film en cuatro episodios, más un prólogo y un epílogo.

El prólogo presenta imágenes alegóricas del México prehispánico.

El episodio “Sandunga” recrea los preparativos de una boda indígena en Tehuantepec.

“Fiesta” desarrolla el ritual de la fiesta brava.

“Maguey” escenifica la tragedia de un campesino victimado por rebelarse contra su patrón.

“Soldadera” muestra el sacrificio de una mujer revolucionaria. El epílogo, también conocido como “Día de muertos”, se refiere al sincretismo de las distintas visiones que coexisten en México alrededor del tema de la muerte.

 

Película filmada en el año 1932, el director soviético busca brindar una muestra de lo que es México. Comienza con una semblanza sobre el director y su equipo, además de las motivaciones que trajeron al director realizar un filme sobre éste país y las razones que lo llevaron a Hollywood, además de explicar la razón por la cual dicho trabajo no fue terminado.

 

 

En una especie de documental antropológico, nos muestra los ritos, las tradiciones y costumbres del pueblo de Tehuantepec, en el cual el matriarcado es el modelo de vida, en el cuál los hombres viven dependientes del trabajo de las mujeres. Es curioso el manejo que hacen los creadores, ya que todos los lugareños se muestran como una feliz e impecable comunidad, con sus vestidos pulcros y bien estilizados tocados y cortes de cabello.

 

El motivo de la fiesta es una boda indígena entre dos jóvenes oriundos y el pueblo echa la casa por la ventana, denotando en apariencia el exceso de recursos, dando como muestra la preparación del banquete nupcial. La comunidad vive en la prosperidad, como reflejo de una parte de la sociedad mexicana en las poblaciones alejadas de la capital. Sería una especie de reflejo del avance de la nación mexicana posterior a un difícil proceso revolucionario.

 

La religiosidad y las danzas resultantes de la mezcla indígena y católica es parte indiscutible de la mexicanidad, en la cual, la jerarquía católica tiene un papel clave en la formación espiritual y tradicional de los pueblos. El auto sufrimiento, el autocastigo como parte de la penitencia y el culto a la virgen de Guadalupe es característico, algo único de México.

 

La valentía es el tema principal de éste capítulo, ahora al enfocarse en la fiesta de toros, en donde convergen la fiesta, la religión, el consumo y la diversión. Son las clases media y alta los que acuden al espectáculo de la matanza de toros, donde las costumbres, la vestimenta y la diversión son diferentes a la antes mostrada en Tehuantepec. Vemos la aparición de la publicidad en la plaza y el uso del dinero como la aprobación de una buena faena del torero.

 

Es interesante como el autor hace un giro a partir del capítulo llamado Maguey. Muestra el proceso de la extracción de aguamiel desde el corazón de la planta de maguey para la preparación de pulque; a partir de aquí, la explotación del peón por parte del capataz y el hacendado hace constante presencia. Una joven pareja recibe el visto bueno y las bendiciones de sus familiares para contraer nupcias, sin embargo, la novia tiene que pasar también la aprobación del patrón.

 

A la mitad de una borrachera con licores y cerveza por parte del hacendado y sus amistades, la joven es violada por uno de los invitados, desatando la furia del joven novio peón, el cuál es azotado y castigado. Se prepara una conjura para vengar la suerte de la pareja, a manos de los poderosos terratenientes que tienen en alta estima al presidente de la nación, Porfirio Díaz el cual se nos presenta como el origen y el causante de todos los abusos que sufren los trabajadores de la hacienda.

 

El porfirismo bárbaro, desalmado y explotador es la constante en éste tramo del filme, la combinación musical, los planos y el argumento así nos lo indican. La rebelión indígena es aniquilada y el hermano de Sebastián, muerto en la batalla al igual que otros rebeldes de la conjura. El castigo debe ser ejemplar y cruel. Las cabezas de los peones sobrevivientes deben ser aplastadas por los cascos de los caballos, como una muerte terrible, no sin antes pasar por un juicio donde los jueces son los mismos hacendados, que les hacen pagar muy caro la muerte de la hija del patrón durante la balacera por el campo de magueyes. Las miradas de rencor y de odio por parte de los peones que presencian el humillante juicio a Sebastián, parecen indicar el caldo de cultivo de la insurrección que desataría la Revolución Mexicana.

 

El episodio de La Soldadera no fue grabado, porque como nos explica Grigory Alexandrov, no quedó presupuesto para la realización del capítulo, sin embargo, nos muestran fotografías que buscan acercar lo más posible a la mirada de Sergei Eisenstein sobre lo que pretendía en este capítulo. El papel de la mujer en la lucha revolucionaria hace posible la participación masculina en la lucha; sin la mujer como el complemento del hombre, no es posible divisar la realidad de la guerra y otorga un papel preponderante a la mujer dentro de éste contexto.

 

Por último, el Epílogo, que es una mirada poética a la fiesta del día de muertos y las procesiones religiosas son una parte inherente de la mexicanidad retratada por Eisenstein; el mexicano se burla y desprecia a la muerte, y organiza fiestas en las que la enfrenta. La mezcla entre lo indígena y el catolicismo romano es una parte identitaria de lo mexicano y se refleja en sus danzas.