Recorridos Intermitentes es la muestra antológica de Mariano Gusils Navasal que puede verse hasta septiembre próximo en las instalaciones del Museo Histórico de la UNSa, en calle Buenos Aires 177.
Mariano es artista visual, gestor cultural, ha realizado curadurías de diferentes proyectos propios e institucionales y también es profesor de Historia.
Esta vez, decidió reunir todo su material, haciendo confluir casi todas sus pasiones en la muestra antológica que acompaña día a día con su presencia en visitas guiadas y otras actividades. Las obras son heterogéneas, realizadas en diferentes registros y técnicas; motivos y temas. Es una mirada a su pasado, desde todas sus biografías posibles y quizás, desde allí también a su propio futuro como continuo explorador de los caminos del arte.
Aquí, algunos detalles del diálogo que mantuvo con Artenautas.
– ¿Por qué una antología a tu edad? (37)
– (Risas) Es verdad, soy joven. Pasa que mucha gente no conocía mi obra porque no la había mostrado salvo dispersamente. He sido curador, he escrito y realizado diferentes roles en torno al arte, pero no como artista. Entonces aproveché que recibí el Plan de Reactivación Cultural de la Provincia, iba a hacer algo chiquito pero luego ví todo lo que tenía y me envalentoné. Hablé con el museo de la UNSa al que estoy relacionado por ser profesor de historia y acá estamos.
–Sos también profesor de historia, ¿cómo vinculás ambas cosas?
– Desde muy chico empecé con los talleres libres, luego me aburrí porque era bastante tradicional la enseñanza y continué solo, leyendo, haciendo y en paralelo cursando la carrera de historia . La historia del arte es lo que une quizás ambos amores, que acá no hay para estudiar de manera profesional, pero lo suplí siendo adscripto de Hernán Ulm en Historia del Arte durante varios años en la Universidad, aprendí mucho ahí también.
Pero como mi obra había quedado rezagada y tenía un volumen de obra interesante para mostrar, me pareció una buena oportunidad de unir mi trayecto personal con mis pasiones: la historia y el arte.
– ¿ Cómo organizaste tu obra?
– Ana Benedetti ofició de curadora en pintura, dibujo y collage; Emma Bartolini que es una joven diseñadora me ayudó con mis archivos en la parte alta y luego Clara Johnston me ayudó con los videos. Fue muy lindo trabajar con ellas, porque uno está muy ensimismado en la obra y cuesta a veces pensarla desde afuera.
“Recorrido Intermitentes” comienza en las salas bajas del museo con un mueble de publicaciones y folletería de muestras donde intervino y otro mueble autoral, ambos cerrados. Un sitio donde aparecen sus fichas, bocetos, notas, pinceles, fotografías, como si los objetos de su taller se hubieran instalado en ese espacio.
Luego vienen la salas donde se pueden ver un video y la recreación de una performance realizada en La Guarda en el año 2013, que dialoga en la sala contigua con una recreación de la obra de aquella época y fotografías.
Luego puede verse en la sala de arriba una organización de catálogos, notas periodísticas y distintos textos escritos durante años, “que no se ve tanto pero me interesa mucho como historiador, como sistematización del archivo que se podría hacer, qué podría hacer cada artista para luego hacer una historia del arte de Salta”- explica.
En otras salas la obra pictórica propiamente dicha con obras de diferentes períodos.
“Una antología permite esas cosas: hacer el propio relato independientemente del año en que se haya realizado. Siempre trabajé de forma experimental así que entre los temas podrás ver que rescato la naturaleza, las estaciones, objetos, pinturas y más recientemente collages”
-¿Que te queda por investigar?
– Mucho. Ahora me enganché con el collage y estoy trabajando en eso, ahora entré en series por ejemplo y estoy en plena producción.
-¿Cómo nace una obra?
– Depende, es muy plástico, no es que aparece un tema y ejecuto. Yo trabajo, hago, el cuadro se va configurando sobre la marcha y luego me pongo a pensar por qué usé determinado color o imagen.
En el recorrido pueden verse también un video con música dodecafónica, fotografías, imágenes de ventanas realizadas con el principio fotográfico (una tela en un bastidor puesta al sol durante dos años) “es que me interesa el tema del paso del tiempo sobre los objetos y la búsqueda a través de distintos registros”
– ¿A dónde te lleva este recorrido?, ¿a vos mismo?
– Para mi es como un punto de inflexión: es la conciencia del camino recorrido, un detenerse, también me da una zona de libertad para hacer realmente lo que quiera y también una visión estratégica de carrera. Me encanta recibir al público y guiarlo sobre de qué va mi obra, trabajar en mi archivo personal e impulsar a otros artistas.
Fue un desafío importante, más aún después de la pandemia
– Por las redes ví tus fotografías con muchos artistas que te acompañaron día tras día . Qué pasa con el público común, ¿se acerca?
– También aunque no tanto porque este museo no es muy conocido. Hubo un público más turístico y otra gente que se va enterando y se acerca. Las visitas guiadas que organicé también trajeron gente y además me gusta tratar de estar en estas instalaciones para recibir a los que vienen.
La muestra, con entrada gratuita, puede visitarse durante agosto y las dos primeras semanas de septiembre, en el Museo Histórico de la UNSa, en calle Buenos Aires 177.
(Patricia Patocco)
Fotografía: Marcelo Saker Eckhardt