Sabrina Sansone es, desde diciembre pasado la Secretaria de Cultura de la Provincia de Salta.
Es docente, bailarina y tiene en su haber una larga trayectoria artística, que incluyó giras por el mundo con diversas compañías y su propia academia de baile. Nunca estuvo en la función pública lo que le parece en ocasiones una gran ventaja y en otras, no tanto.
Lo real es que desde que llegó a su cargo, ha sido continuamente señalada por el ambiente artístico local por diversas situaciones como la de permitir que el titular de Turismo ocupe oficinas en Casa de la Cultura, la de no implementar políticas culturales claras y con la pandemia, de falta de respuestas a las peticiones de los diversos grupos.
Al asumir el gobierno de Gustavo Saénz, hubo un cambio en la conformación de los Ministerios y Cultura pasó a depender nuevamente del Ministerio de Educación (en la gestión anterior era un Ministerio, el de Cultura, Turismo y Deportes; luego pasó a ser nominado diferente “de Turismo, Cultura y Deportes” ). Finalmente, pasó a ser Secretaría y a depender del Ministerio de Educación
Esta enumeración de cambio de denominaciones no es menor, significa, en gran medida la importancia y el presupuesto que se le brinda a una repartición.
De todo ello conversó con ARTENAUTAS, en días de semi confinamiento y con cinco personas trabajando en el enorme edificio de Caseros 460.
Joven, dinámica, inexperta en política, Sabrina se considera una más del colectivo artístico y no llega a comprender el alcance de algunas interpelaciones o agresiones de las que ha sido víctima. La charla que iba a ser de pocos minutos, se extendió pero esta es una síntesis de todo lo que nos dijo.
– ¿Cómo estás viviendo este tiempo de pandemia?
– En lo personal lo vivo en comunión con lo laboral. Salvo los primeros 15 días de confinamiento en que nos teníamos que guardar todos, después salí a trabajar, hay cosas inmediatas que no pueden esperar así que empecé a venir a la Secretaría y estas últimas tres semanas llego a la mañana y me voy muy tarde, estoy todo el tiempo .
Esto es algo mundial que nos pasó por arriba. Teníamos determinadas ideas y un plan de gestión que abruptamente tuvo que cambiar hacia otras cosas.
– Hablemos de eso, ¿que plan, qué ideas tenías para la Secretaría?
– Cuando me llamaron para este cargo propuse la idea de trabajar transversalmente. Sentía que los museos estaban por un lado, el Instituto de Música por el otro, ocupándose casi solamente de la Orquesta Sinfónica así que la idea era hacer un trabajo transversal, dándole más vida a los museos y al teatro, con actividades constantes. Se empezó con el foyer del Teatro Provincial .
Mi idea era mostrarnos, intervenir las calles, los diversos ámbitos en un ida y vuelta de artistas de distintas disciplinas. Mas allá de que siempre hubo mucho arte y cultura, pensaba trabajar todo como en un gran escenario. Tenemos varios cuerpos estables: orquesta, danza, danza foclórica, niños que tocan instrumentos, que bailan, un departamento coral, museos, un montón de artistas independientes, artesanos y además todo lo nuevo que nos trae la gente joven, que tenemos que pensar e instrumentar. La provincia tiene además 60 municipios con lo suyo.
Hay otras provincias que no son tan ricas en lo cultural.
– Se dice que tenés un concepto tinellizado de la cultura
– Cada vez que escucho eso pienso en todo lo que aprendí trabajando en ese programa, el nivel profesionalismo y laburo…puede gustar o no porque es un reality show que si bien muestra la danza, es un gran espectáculo lleno de actores, músicos, escenógrafos y demás trabajadores. Entonce pienso, sí, mostremos aquí también lo que tenemos, pero unámonos antes.
-Pero eso implicaría pensar que todo es show…¿y el resto?
– No, no pienso que todas las actividades estén incluídas, pero… por otro lado, depende de cómo lo veas. Por ejemplo un artesano, ¿ qué quiere?. Vender y que sus productos sean conocidos. Llevado a mi vocabulario de bailarina es hacer un espectáculo. Más allá de eso tenemos delineados concursos audiovisuales, para artistas plásticos y en los próximos días salen los concursos literarios. Obvio que por mi formación soy más conocedora del mundo del espectáculo, por lo demás simplemente soy una trabajadora.
– ¿Con que panorama te encontraste en Salta ?
– A fines de diciembre hicimos reuniones con diferentes asociaciones para conocernos, saber qué visiones tenían. Vi muchas personas enojadas luego de un gobierno muy largo y también gente que quiere cambios y quiere sumar.
– A esa época se remonta el primer descontento generalizado de la comunidad artística cuando reclamaron que el Ministerio de Turismo se instalara en Casa de la Cultura…
– Si, porque pensaron que ese factor le iba a quitar poder a Cultura. El ministro Peña está acá porque antes dependíamos de turismo y era la oficina del ministro, hoy por hoy se separó y dependemos de Educación. Pero, podemos compartir, no pasa nada. Obviamente que más adelante alquilará un espacio y armará otras oficinas. Yo no tengo dificultades y tampoco veo que perdamos nada por darle una oficina. No va por ahí mi lucha.
Entiendo el valor simbólico y real de lo que costó conseguir esta Casa y a mi me gustaría porque nosotros tenemos una estructura muy grande, inclusive en cantidad de personal, más de 600 personas pero por ahora no se puede. También me encantaría que siguiéramos siendo un ministerio, pero, es la realidad. No puedo hacer nada por ahora.
– Hubo un proceso de enojo in-crescendo, los artistas piden diálogo, propuestas claras, políticas culturales, dinero para el sector… ¿ en qué están trabajando?
– Bueno, pasaron muchas cosas. Pensemos que la pandemia es algo mundial y casi desde que asumí la gestión estamos en emergencia. Obviamente el hambre lo es y a través de la emergencia gestionamos tanto para capital como para los municipios que estaban en emergencia desde antes. A los pocos días de la pandemia, entró la primera nota de uno de los sectores, uno comité de emergencia de uno de los sectores.
-¿Cuál fue la respuesta de la Secretaría?
– Quiero aclararlo, porque muchas veces se piensa que no hay interés por hacer cosas o no se piensa. La verdad es que los primeros quince días, todo el presupuesto del gobierno fue a Salud y Desarrollo Social. Entonces pensamos en hacer un concurso, viendo la cantidad de espacio que tenemos. Yo después de años de autogestión privada, cada vez que hago un espectáculo de fin de año pago el teatro, más la gente que trabaja, es muchísimo gasto. Entonces en esos primeros quince días quisimos ofrecer soluciones a largo plazo para que a través del concurso, cuando se levantara todo, tuvieran la oportunidad de presentar lo que saben hacer sin todo el inmenso costo que significa. Esa fue la idea inicial, para artistas jóvenes, emergentes. Al concurso se presentaron 700 personas.
Va a la Usina cultural todo lo que individual y lo grupal a Casa de la Cultura, afiches, difusión, capacitación, toda la ayuda y se llevan además, el borderaux… no lo veo nada mal.
A muchos les interesó, muchos otros dijeron que no les sirve.
– ¿Y para ese segmento que ya tiene su trayectoria?
– Salió lo del Fondo Ciudadano Extraordinario para esta emergencia, son 120 beneficiarios de 25.000. Es lo que se pudo, pero te cuento que somos la única provincia que hemos podido bajar dinero para cultura. Está bien que el Estado tiene que apoyar y ayudar pero es imposible llegar a todo el mundo. Lo que planteo es que tenemos que reinventarnos.
Hablar de política cultural es muy difícil, porque ahora la política es la emergencia y nos sobrepasó…La primera intención era hacer un trabajo transversal con todas las artes y todos los artistas. Digamos que los artistas queremos mostrar lo que tenemos, compartir nuestra producción, comunicar y yo quería que podamos intervenir constantemente el espacio del otro artista, trabajar en forma conjunta.
– La intervención de la senadora Nora Giménez destrabó la posibilidad de algún subsidio?
– Nosotros ya estábamos trabajando en un censo, un registro de todos los trabajadores del sector , no hay datos certeros y reales, también trabajando con el Ente Regulador por el tema de los servicios públicos para los teatros y espacio culturales y además en la entrega de módulos alimenticios. Aclaremos que la Secretaría no da subsidios ni entrega módulos alimenticios pero en la emergencia tuvimos que funcionar como un brazo de Desarrollo Social. Entregamos 350 en la provincia, para artistas puntualmente. Estamos a la espera de 600 bolsones más que pedimos. No tenemos la facultad de hacerlo, lo tenemos que pedir a Desarrollo Social.
Los artistas que lo necesiten pueden llamar en forma directa al 4216285, interno 105, los datos se cruzan en ANSEs y terminan yendo para los más necesitados. Obvio que un bolsón es alimento para una semana o poco más, pero dada la situación, se hace.
La senadora Nora Giménez se acercó al Ministerio de Educación pidiendo el módulo alimentario y lo de los servicios públicos – propuestas que ya estábamos trabajando- pero igual nos vino muy bien su ayuda. Trabajamos con gente de su equipo durante 3 días viendo la forma rápida, sobre todo para hacer un registro y saber qué artistas hay y en qué situación está cada uno. Estos datos que no teníamos, nos van a servir para planificar todo el futuro.
También hablamos con Nora sobre el IFE, que da Nación y para el que se necesita ser monotributista. Sabemos que los artistas trabajamos – la mayoría de manera informal- así que ella se comprometió a llevar a Nación esa lista de trabajadores informales para que puedan recibir el IFE. Eso se trabajó con la senadora y me pareció fantástica su ayuda.
– ¿En medio de todo esto, por qué se convocó a esa reunión con pocos músicos, que generó tanto malestar?
– Cuento como fue, Kike Teruel presentó una nota a Matías Posadas, con un protocolo pidiendo que los dejaran grabar un disco aprovechando que se estaban abriendo diversas actividades. Previamente me había llamado David Leiva ofreciendo su experiencia preocupado por todo lo que estaba sucediendo. Luego fui invitada a una reunión que Posadas organizó con ellos. Cuando llegué estaban todos los artistas que se vieron en la foto que fueron a hacer pedidos puntuales.
Yo digo, ¿como no hay un programa de escándalos en Salta?…mirá que anduve trabajando por el mundo y hay cosas que no vi jamás en otros lugares.
Me sorprende porque siempre se ve la mitad del vaso vacío y el mal pensamiento está primero. Entiendo que la gente esté enojada y defraudada por muchas cosas que no sucedieron desde antes, pero la verdad quisiera que los artistas entendieran que soy una de ellos y quiero lo mejor para todos. Muchos se ofenden porque no los atiendo personalmente. No puedo, no me da el tiempo, pero mis equipos están siempre disponibles…
“ Puede ser que no tenga experiencia política, pero aprendo muy rápido – explica de pronto, enfática – ¿Y sabés qué?, soy nueva y no estoy sucia, no vengo a hacer negocios ni nada, vengo a dar todo lo que tengo. Pero si no me dan la posibilidad… Hay gente que está abucheándome todo el tiempo, tampoco puedo con eso, prefiero muchas veces quedarme callada.
Se que esa foto restó mucho pero yo fui a esa reunión en calidad de invitada y logré algo bueno para los artistas, porque luego nos invitaron a comer con el Gobernador y pude plantear directamente los gravísimos problemas que tenemos y que la gente necesita dinero. Me escuchó, preguntó de cuánta gente hablamos y me dijo que sí, así que en los próximos días vamos a tener novedades”- dice enfáticamente y sigue – “ Les pido a los artistas que en vez de enojarse se registren y nos pasen el NIS, para trasladarlo al Ente por ejemplo, para que no corten los servicios a estudios, centros culturales, teatros, academias”
He dispuesto una persona técnica de cada área como referente para que informe en detalle todo esto y se han habilitado mesas de diálogo para charlar y continuar encontrando la vuelta. Pueden sumarse los independientes también.
Hay muchos otros proyectos, como el de hacer un programa solidario para recaudar fondos y generar una movida a beneficio de los trabajadores de la cultura.
No es fácil la tarea de gestionar y menos en un contexto de pandemia donde no hay plata para nada y para mí la gestión termina cuando el dinero llega a la gente, hasta tanto no estoy tranquila
– ¿Y qué sucede con el presupuesto de Cultura?
– Bueno, en noviembre del año pasado no fue aprobado.
Comenzó el año y me informaron que sería más o menos como el del año pasado con un 30 % menos. Iniciamos el año sin presupuesto, sin previsión de plata. Cuando llega la pandemia se congela todo y fue mucho peor.
– ¿Cultura de la Nación no aporta algo para Salta?
– También tengo contacto directo con Cultura de la Nación. Tuvimos reuniones por zoom por el plan Desarrollar, que son 30 millones de pesos para los centros culturales del país. Pedí que lo repartan según la cantidad de centros que hay en cada provincia porque sino se que se lo quedan en Buenos Aires, Rosario, Mendoza.
Luego me contactaron para que la gente de Salta llene prontamente los formularios para que manden a Salta 4 o 5 beneficiarios. Hablé y solo se presentó uno, o sea, no entiendo qué pasa. Gestiones se están haciendo y muchas pero se necesita que la gente se inscriba pronto. Queremos trabajar en horizontalidad, necesitamos que los artistas se anoten.
– ¿Cómo te imaginás el día después de la pandemia?
– Vaya a saber cuándo será, está difícil pensar en los teatros porque vamos a tener que evitar aglomeraciones, pero puesta a imaginar querría, una vez que se habilite todo, una gran presentación como desfiles de arte en los diferentes barrios de Salta.
Queremos también que salga la Ley de Mecenazgo, salió la ley de exenciones para audiovisuales, para que no paguen ingresos brutos.
El Estado tiene que trabajar asociado a los privados, pero no puede dar todo, la idea es que sea un ida y vuelta. Hay que traer proyectos, para que el Estado colabore pero no puede subsidiar.
– ¿Vas a resistir cuatro años?
– Tengo todo el ímpetu. Es un desafío grande, tomé este compromiso siendo muy realista, sabía que iban a haber complicaciones, no imaginé que tantas. Pero por algo me habrá tocado a mí, tengo carácter, tengo una fortaleza que me ayuda muchísimo, aunque…se que no vengo de la política y encima soy mujer. Recibo muchas agresiones por ambos factores y los voy manejando pero te digo…hablamos del machismo pero vivimos en una sociedad donde la mujer también es machista.
En otros ámbitos de trabajo, en teatros y en los Bailando, vi tanto ego y tanta competencia, pero nunca lo que viví en estos días. Mirá que tuve discusiones con Gladys, la bomba tucumana, con la que nos hemos matado, pero a esta altura pienso que la extraño, que Gladys era una bebé de pecho!!
– ¿Por qué lo viste solamente dos veces al gobernador?
– Bueno, porque hay una pirámide de trabajo y obviamente represento a una secretaría.
(Patricia Patocco)