Idea Vilariño
EL ESPLENDOR DE LA VIDA

Idea Vilariño, poeta uruguaya que nació en 1920 y falleció en 2009 mantuvo a lo largo de su vida una actitud muy discreta con respecto a la difusión de su obra.
Sin embargo, antes de cumplir los treinta años era ya ampliamente conocida por su talento y hoy se la conoce ampliamente en Latinoamérica, Estados Unidos y Austria donde su obra fue traducida.
Poeta, crítica literaria, compositora de canciones, traductora y educadora, está considerada una de las voces más relevantes de la generación del 45. Recientemente, la editoral Lumen sacó un cuidado volumen con su poesía completa y dice en la contratapa “ Su poesía – escasa y sobria-, lentamente madurada- transita siempre por los extremos, tensa, acorralada por una íntima urgencia. Quizás el asunto que con mayor frecuencia aparece en esta poesía sea la muerte, pero una muerte que late y se experimenta en el esplendor de la vida …” Publicamos aquí algunos de sus poemas.

COMPARACIÓN

Como en la playa virgen
dobla el viento
el leve junco verde
que dibuja
un delicado círculo de arena
así en mí tu recuerdo.
(1966)

HASTA CUÁNDO
Hasta cuándo los gestos
las señas las palabras
la sabia comedia
la mascarada atroz
esta triste aventura
de ser cálido y fuerte
y andar entre las cosas
inanimadas frías
a cuyo estado un día
llegaremos sin dudas.

TODO ES MUY SIMPLE
Todo es muy simple mucho
más simple y sin embargo
aun así hay momentos
en que es demasiado para mí
en que no entiendo
y no sé si reírme a carcajadas
o si llorar de miedo
o estarme aquí sin llanto
sin risas
en silencio
asumiendo mi vida
mi tránsito
mi tiempo.
(1962)

A UN POETA
Pobre Rubén creíste
en todas esas cosas
gloria sexo poesía
a veces en América
y después te moriste
y ahí estás muerto
muerto.
Pobre pobre Rubén
te rodeaste de mitos
de cisnes de Parises y de Grecias
de cargos y de deudas
de amigos sinvergüenzas.
Te engañaron te hicieron
el cuento te robaron
te robaron Rubén
_mira que fuiste tonto-
o bien no te pagaban
aunque a veces tú mismo
derrochaste tus pesos
con la embriaguez de un niño.
Y escribiste bobadas
por encargo por juego
y hasta por compromiso.
Mira que fuiste tonto
casarte con Rosario
andar con presidentes
alternar con snobs
caer con cualquier pícaro.
No puedo respetarte
y ni siquiera ver
de donde te brotaban
tus versos tus palabras
tu tremendo lirismo
tu canto tu increíble
belleza tu poesía.
No sé Rubén no sé
no sé pero brotaba
–ritmo canción tormenta
río apacible sangre
dulce oscura que mana-.
No sé. Acaso del pobre
corazón arrancado
-eso dicen-
-o del pobre cerebro
que después disputaron
-eso dicen-
a punta de revólver.
No sé no sé Rubén
no sé pero qué hermosa
a veces tu poesía
qué grande qué valiente
o qué honda qué humana
a veces tu poesía.
Vaya a saber. Tal vez
tú mismo no supieras.

( Leído en el Encuentro con Rubén Darío, en Casa de las Américas, en La Habana, 1966)

SOLO PARA DECIRLO

Qué hijos de un tal por cual
qué bestias
cómo decirlo de otro modo
cómo
qué dedo acusador es suficiente
qué anatema
qué llanto
qué palabra que no sea un insulto
serviría
no para conmoverlos
ni para convencerlos
ni para detenerlos.
Sólo para decirlo.
(1970)